Cualquier fanático de un jarro fresco de cerveza artesanal te dará una conferencia similar a esta: No es el recipiente, sino el contenido del recipiente, ya sea una IPA jugosa o una lager refrescante, lo que importa. Pero la lógica del argumento de "lo que importa es lo de adentro" queda en entredicho si ese primer sorbo de cerveza resulta estar sin gas o, peor aún, caliente y aburrida, debido a que no se almacenó ni transportó en un vaso adecuado. Ese vaso adecuado es un growler de cerveza.
Leer artículo completo:
https://www.esquire.com/food-drink/g38391343/best-beer-growlers