Es posible que no disfrutes de los datos tanto como disfrutas de la cerveza, pero en honor al Día Nacional de los Amantes de la Cerveza de la semana pasada, por favor, permítenos compartir algunas estadísticas sobre nuestra amada industria, cortesía de la Asociación de Cerveceros. (Y si los números no son lo tuyo, no te preocupes, continuaremos con la historia a partir de ahí...)

• En los últimos diez años, el número de cervecerías ha aumentado de 1,511 a 6,327.
• El año pasado, las pequeñas cervecerías artesanales independientes contribuyeron con $76.2 mil millones a la economía de Estados Unidos.
• En 2017 solo, se abrieron 995 nuevas microcervecerías y brew pubs.

Entonces, seguro podemos decir que amamos nuestra cerveza en este país, lo suficiente como para tener un día dedicado a celebrar a aquellos que disfrutan levantando una pinta de su bebida lupulada favorita. Pero aunque los números anteriores son persuasivos, tal vez no sorprendan, ya que todos somos conscientes de que la industria cervecera ha estado en auge durante las últimas décadas. Sin embargo, lo que puede ser menos conocido es lo grande y vibrante que era el escenario cervecero hace 150 años, o cuánto decayó antes del resurgimiento que estamos disfrutando actualmente.

En 1873, en la época de mayor auge de la industria, había aproximadamente 4,000 cervecerías en funcionamiento. Esos números comenzaron a caer en picada al año siguiente, alcanzando un punto bajo de 89 cervecerías en 1977 (sin contar el período de prohibición, cuando el número fue cero, por supuesto). Smithsonian.com tiene un artículo interesante sobre por qué la industria cayó a números tan lamentables, pero dos factores clave fueron la consolidación por parte de las grandes cervecerías y la falta de variedad en los estilos de cerveza.

No fue hasta mediados de los años 90 que las cosas comenzaron a cambiar, y tardó hasta 2015, bien entrado nuestro período de renacimiento, para superar los días gloriosos del siglo XIX. A medida que el número de cervecerías artesanales comenzó a crecer, también lo hizo la variedad de estilos, pero también comenzaron a ocurrir otras cosas. Las personas tenían más acceso a la información. Los detalles sobre una nueva cerveza o cervecería estaban a un clic de distancia. Las aplicaciones nos permitían encontrar y calificar nuestras cervezas favoritas. Las redes sociales nos ofrecían una comunidad que se extendía más allá de las paredes del brew pub. Todos esos factores han seguido moldeando la experiencia de beber cerveza tal como la conocemos hoy y seguramente son una fuerza impulsora detrás del éxito general de la industria.

Amamos beber cerveza desde hace siglos, pero ahora los verdaderos fanáticos también disfrutan compartiendo la cerveza. De hecho, GrowlerWerks nació de un deseo de nuestro fundador, Shawn Huff, de poder compartir cerveza artesanal fresca. ¡Así que agarra tu growler y celebra la alegría que viene de conectarte con un amante de la cerveza compañero!